EL PRESIDENTE 
QUE PRESIDIÓ
 DESPUÉS DE MORIR

Lo de Zapatero es  la ubicuidad, lleva fuera de la gobernanza  casi un año cumplido y prosigue en las bocas calumniadoras de los integrantes de esta impresentable derecha; es decir, sigue como Lázaro  "gobernando" después de muerto.

Esta  deliciosa derecha  “asejuró” que con su entrada en Moncloa iban a  acabar de un plumazo con el paro;  en un plis plas, vaya, o sea  de medio millón en medio millón. Pero lo que en realidad están haciendo  no es sino incrementarlo sin tino.

Este chico raxoi debería promocionarse a sí mismo enunciando alguna verdad de tarde en tarde para fomentar su increíble credibilidad de engañabobos compulsivo. Y lo mismo diré de todos sus adláteres, y renunciar para siempre  a toda esa  sarta de  idénticas  falsedades  y falacias comunes que el jefe pone en circulación con reincidencia. Este señor registrador quiere dar por concluida la era de las huelgas y las manifestaciones, y para ello instala a los geos en cada rincón de este pueblo.

Así que cuando a un único de estos policías rodeado de medio millón largo de manifestantes pacifistas -como todo el mundo sabe- se le parte un dedo inopinadamente es como  un milagro,  y este incidente será considerado como un grave  delito contra la autoridad y el orden, y al policía una víctima deliberada. Nunca he oído tontería semejante para justificar  lo que se pretende que sea un desorden público gravísimo, aunque en el caso inverso, sin embargo, una matanza como la Irak se trataría  de un fútil incidente  sin importancia en represalia  contra una banda de simples indignados y “donnadies” -incidente  bien conocido, y en este caso, evaluado como un simple e inocente daño colateral, como aquellos impunes daños de la histórica  Mesopotamia, como el asesinato de Couso, al que han dejado extinguir, matándolo por segunda vez. Un recuerdo entrañable, mi querido Couso.

He aquí a los adversarios despiadados de Zapatero que hoy se quejan de la falta de ayuda de éste  en la gobernabilidad de nuestro desastroso país (bueno, vuestro, porque yo en estas condiciones ni lo quiero) que  les dejó el “remendón”;  país que evidentemente fueron ellos quienes así lo dejaron tras meternos en una previa irresponsable, ilegítima e injustificable  guerra asumida por el melifluo adulador de acentos californianos nuestro servil presidente de los intereses yanquis de entonces  
en comparsa con los otros  mosqueteros.

Se quejan de las mentiras y falsedades de Zapatero, que es otra calumnia  continua más por su parte- como estrategia para desbancarlos del poder, pero ahora que han llegado a la bancada de los acusados,  le han visto al fin las terribles orejas al lobo y han caído en la cuenta de  que la tecnología de la  gobernanza así como el entramado de la economía no se lo saben,  para nada tienen puta idea de estas misteriosas materias, y se han quedado además de ineptos, pasmados, mientras se muestran como una vergonzosa chirigota de ineptos que no saben qué hacer sino flirtear aduladores con la zarina alemana  al tiempo que la regalan a puñados nuestra más preciada soberanía. Tiene cojones que esto lo lleven a cabo los  patrioteros por excelencia, éstos que ya no se escandalizan cuando pierden soberanía patria a toneladas, y tragan terrorismo a puñados, que no han cesado de engañar y falsificar toda clase de acciones al pueblo de tontos en que nos tienen casi  convertidos.

Esta derecha de toda la vida, repetida desde siempre como un cromo, en la que todos sus miembros como auténticos “donde va  la gente, va Vicente”, se pronuncian como fotocopias vivientes con todo su inútil bagaje de ignorancia y egoísmo para proseguir aprovechándose y saqueando  toda clase de riquezas a base de emisiones de decretos para legitimar abusos y pillajes a favor de las oligarquías sociales o industriales que son un insulto grave a la inteligencia de los españolitos de a pie.

La violencia de estado que este gobierno con sus tremendas e injustas medidas está originando  el clima alarmante que ha dado comienzo ya, y no por parte de la masa de víctimas sumidas en la miseria a causa de la impasibilidad  de un poder  que en vez de luchar por resolver los problemas de todo tipo que sufren estas clases paradas (y muy pronto ya detenidas) se dedica a  silenciar sus errores y flirtear con la panda de enemigos que nos crecen como enanos y nos roban como a guiris: la argentinita, la merkelita, gibraltarito y el reino unido, la moroquita asaltando Ceuta, el otro peñón pere-Gil-ero...y para qué citar a toda la banda de hampones del interior. encabezado por Marbella, Urdanga y toda clase de predadores

Creo que desde hace una semana, con el inesperado asalto de unos pocos de rojos a la  sagrada propiedad privada de una hipermercadería andaluza,  este gobierno se ha quedado lívido y traspuesto, opaco. Es cojonudo, que a esta gente de la opulencia, vividora de las tetas de la patria jamás se le hubiera ocurrido que es la miseria de las clases necesitadas la que acaba desembocando y enarbolando las verdaderas y legítimas revoluciones. Esta gente que no es precisamente la que se ha hartado  de manifestar que  los partidos y las clases sociales han muerto, no parece enterarse de nada. ¡Que se lo digan al de Marinaleda! Con un par de acontecimientos como éste, los depredadores se lo van a pensar si no son rematadamente estúpidos.

Y vamos a ver como van a continuar manteniendo ese orden público  de los cortijos funerarios  que tanto les cautiva a estos tíos de la más falaz e ilegítima ultraderecha. ¿Cómo coño imaginan éstos borricos que van a sobrevivir los ya siete millones de parados: siete, sí, -aunque queráis hasta en esto seguir con los “recortes” y el latrocinio de las "hipotecas". 

¿No es cierto que a los putos esquilmadores de los bancos les vamos a regalar los memos de los españolitos innumerables miles de millones de euros de nuestros bolsillos...lo justo es que dejemos a cambio de pagar todas las deudas hipotecarias. No se si a alguien se le ha olvidado ya lo que eran  las "cajas". Eran precisamente unas auténticas cajas o huchas en las que el obreraje custodiaba los fondos que recolectaban los trabajadores entre ellos destinados a hacer frente a los gastos que la rapiña empresarial les originaba mediante la usurpación de pagas y salarios en  tiempos de huelgas o de otros acontecimientos elaborados por la rapiña empresarial. Y fíjense, en lo que se han llegado hoy a  convertir. ¡Tiene cojones!

Juan Antonio Cadenas